El Almagro David Martín, inexplicablemente, cedió un empate al filial albaceteño en el minuto 90. Duro golpe para los almagreños que claramente merecieron la victoria.
Las cosas que tiene el fútbol y más concretamente la Tercera División. El Almagro C.F. una vez más salÍa con toda su artillería ante el Albacete B. Control férreo del centro del campo y llegadas a puerta contraria siempre cargadas de peligro. Chendo primero y dos asociaciones posteriores de Sevilla y Ureña eran sacadas por la defensa del equipo visitante en la misma línea. La tendencia era clara, los rojillos acabarían marcando.
Y así sucedía en el 38. Nueva triangulación que comienza Chendo abriendo a banda para De la Hoz que se interna en el área y da el pase hacia atrás para que Santana remache y convierta el 1-0. Jugada similar a la de la semana pasada en Carrión. Este resultado tranquilizaba a los del Manuel Trujillo y con este resultado se llegaba al final de los primeros 45 minutos.
La segunda mitad fue más de lo mismo, Chendo, Juanpe y Ureña seguían creando ocasiones pero no se sentenciaba. Un Albacete B agazapado esperaba su momento. Martín comenzó su carrusel de cambios. Cuando llega este momento, es cierto, que si se nota algo que el equipo pierde algo de intensidad. Pero esto sucede cuando se tiene una plantilla de calidad, pero justa de efectivos.
Cuando parecía que el partido estaba sentenciado, un último córner del Albacete era rematado por Raúl, que había entrado en la segunda mitad, y convertía el definitivo 1-1. Desde ese momento hasta el final, demasiadas escaramuzas y aglomeraciones de jugadores que impidieron que el choque diera lugar a alguna que otra ocasión. David Sevilla jugó los 90 minutos y volvió a estar muy activo en ataque. Sus asociaciones con Ureña siempre crean peligro a pesar de que hoy no haya acabado ninguna de ellas en gol.
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