El Plasencia le plantó cara a un Cacereño que utilizó la ley del mínimo esfuerzo para llevarse los tres puntos del feudo placentino.
La U.P. Plasencia mereció mucho más, al menos un empate. Pero es que el líder no perdona. Al igual que hizo el C.D. Badajoz hace unas semanas, los de la capital aprovecharon con creces lo poco que crearon arriba y sentenciaron el partido en el 9 de partido. Además, el equipo verde aprovecha el pinchazo del Badajoz en Almendralejo, ya que el Extremadura B le empató el choque en el 93, dejando de esta forma al segundo clasificado a 6 puntos.
El Plasencia por su parte planteó un partido serio, con mucho intensidad defensiva y sacando toda su artillería en ataque para intentar puntuar. No pudo ser, pero una vez más las sensaciones fueron buenas.
La primera ocasión importante del partido la tenía Pedro Gilarte en el 3 de encuentro. Un balón dentro del área pequeña le llega al jugador placentino que en su intento de rematar a bocajarro no logra engancharla para colocar el primero en el marcador. Los locales querían aprovechar el empuje de la grada para ponerse por delante, pero eso no sucedió.
Quién si convirtió la primera oportunidad que tuvo fue Copete. Un jugadón por banda de Martins Diop, en el que superaba a Juanals, acababa con el senegalés en línea de fondo poniendo un balón perfecto a Copete, el disparo de este daba en el palo izquierdo de Manolo Ladero y acababa convirtiéndose en el 1-0. Cuarto gol de Copete en Liga que le coloca como segundo máximo artillero del conjunto cacereño.
Ya en la segunda mitad, el equipo de Diego Pastelero salió con mucha intensidad aún a intentar al menos lograr el gol del empate. Y es que el líder decepcionó bastante en la segunda mitad no siendo el equipo peligroso de los primeros cuarenta y cinco minutos. Fruto de esa intensidad, en el minuto 72, el capitán Luismi en un choque con un contrario, sufría un fuerte golpe en su hombro izquierdo (posiblemente una lesión en el hombro, aún sin confirmar) y tuvo que ser sustituido por Juanito que salió como delantero centro.
Pedro Gilarte y Sergio Sánchez tuvieron una ocasión que podía haber acabado en gol, pero Camacho seguía sin tener excesivos problemas en el día de hoy. Incluso salió Javi Sánchez para obrar el milagro arriba. Pero finalmente una vez más, como ya ocurriera en pretemporada, el Cacereño se llevaba el partido sin haber realizado un buen encuentro. Pero eso es lo que tiene ser líder, que con poco, muchas veces se saca «petróleo».
Toca pensar en el próxima partido ante el Moralo en Navalmoral de la Mata el próximo domingo.
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