La Unión Polideportiva Plasencia recuperó sensaciones pero se quedó a las puertas de la victoria. Un punto que sabe a poco y que no le permite seguir avanzando.
La Unión Polideportiva Plasencia volvió a dejarse la piel en casa pero otra vez sin victoria. Las dos derrotas anteriores había hecho mucho daño a los hombres de Diego Pastelero y era necesario cerrar la mala racha con un triunfo sin excusas. Finalmente no pudo ser, el equipo llegó a irse hasta por 2-0 en el marcador pero el Calamonte supo reaccionar a tiempo para sacar al menos un empate.
Muy pronto se adelantaba el equipo blanquinegro. A los 8 minutos un pase de Segura era aprovechado por Luismi para adelantar a los suyos tras un testarazo. Comenzaba bien el partido. El dominio del esférico era local y no estaban dispuestos a perder el control del centro del campo. Apenas 15 minutos después llegaba el segundo. En esta ocasión era Juanito el que parecía que con su rúbrica iba a sentenciar el partido cuando aún no se llevaba cumplida ni la media hora de juego.
Pero todo iba a cambiar. El Club Deportivo Calamonte golpearía dos veces y en momentos claves. El primero justo en el 45 antes del descanso, Álvaro acortaba distancias poniendo el 2-1 en el marcador. A pesar de que la Unión se mantuvo firme, es cierto que los calamonteños empezaron a llegar con más asiduidad. Y así en el 73 llegaba el gol del empate definitivo obra de Alberto Caldera que cerraría el resultado.
Cuatro semanas consecutivas sin ganar y ahora tocará visitar al Cacereño la próxima semana, casi nada.