7 partidos restan para el final y enfrente espera la Llagostera. Otro de los rivales implicados en la lucha por la salvación. Se espera un partido intenso y con mucha presión.
A siete partidos para el final, el margen de maniobra se estrecha demasiado para el Atlético Levante. La derrota del pasado sábado en casa hizo mucho daño y habrá que intentar arreglarlo este fin de semana ante otro rival que se juega todo en este encuentro, la Llagostera. Partido a cara de perro en el que ambos contendientes tendrán que darlo todo para intentar llevarse los tres puntos y seguir en su lucha frenética por la salvación. En la ida los de Carlos Granero fueron superiores y lograron vencer por 2-0, por lo tanto las esperanzas están puestas en repetir la gesta.
El conjunto catalán viene de empatar la semana pasada ante el Sabadell en el Nou Municipal de Palamós. Con 34 puntos es de los equipos que más cerca se encuentra de la zona peligrosa. Concretamente el Atlético Levante está a tan solo cuatro puntos de estos, por lo que una victoria granota complicaría muchísimo la situación de la Llagostera.
El equipo de Carlos Granero por su parte sigue apostando por la salvación. El equipo sigue jugando bien pero en algunos momentos clave la pelotita sigue sin querer entrar. También es importante la evolución del solanero Fran Manzanara dentro del equipo. Partido a partido sigue rindiendo a un gran nivel en el centro del campo y siendo una de las piezas claves de Granero esta temporada. La guinda al pastel sin duda sería conseguir la permanencia un año más del equipo en la categoría. Solo falta una pequeña dosis de fortuna que hasta el momento el Atlético Levante no ha tenido en toda la temporada.
